Es un candelabro o lámpara de aceite de siete brazos. Así mismo, es uno de los elementos rituales del judaísmo y uno de sus símbolos más antiguos. El destino de la menorá original usada en el segundo templo es un misterio. Una representación del mismo se guarda en el Arco de Tito, el cual se encuentra expuesto en Roma. Se dice que el original permaneció allí hasta la invasión de los vándalos en el año 455 D.C. El ejército bizantino la recuperó en 533, llevándola a Constantinopla. A partir de ese momento, no se tiene ningún dato. Existe la teoría de que fue llevada de vuelta a Jerusalén.
La posibilidad de morir es algo a lo que tendríamos que enfrentarnos todos desde el primer momento que nos despertamos pero sin embargo es una realidad que intentamos siempre evadir de nuestra mente como si fuera una idea que lejos de ser irreversible pudiéramos negar para hacerla realidad. Lo lógico es entender que esto nos llevaría a una situación de conflicto dónde nuestra percepción de los acontecimientos se vería abocada al fracaso al no ser consciente de uno de los factores clave de la vida, sin embargo parece suceder todo lo contrario, pues en los diferentes aspectos en los que nos movemos en sociedad parece que el limitar el concepto de la muerte al breve espacio de tiempo dentro de nuestra vida cotidiana es suficiente para limitar ese proceso destructivo de la propia psique que nos llevaría a un colapso nervioso y social. La única verdad de todo esto es que está propia negación de nuestra existencia como seres finitos nos está llevando a un estilo de vida y pensamiento q...